El Comité Aragonés de Agricultura
Ecológica realiza un estudio con la Cámara de Comercio e Industria de Zaragoza,
para detectar las oportunidades de negocio en los países del centro y norte
europeo —Alemania, Dinamarca, Francia y Suiza—, donde no deja de crecer el
consumo de alimentos elaborados con materias primas obtenidas en cultivos
ecológicos; concretamente en molinos, harineras y semoleras europeas que
podrían convertirse en clientes del trigo duro ecológico aragonés, que «a pesar
de su calidad y de su reconocimiento no encuentra nicho de mercado en España», según
su presidente, José Miguel Sanz,
La nueva junta de CAAE apuesta
por el cereal porque este cultivo es el que mayor presencia tiene en toda la
superficie ecológica aragonesa. De las 61.119,58 hectáreas dedicada a la
producción ecológica, el 80 % están ocupadas por trigo duro. Y de los 771
operadores registrados, el 85 % son cerealistas. Sin embargo, esta producción, termina
vendiéndose en el mercado tradicional, con lo que se llega a perder entre 6 y 9
céntimos por kilo.
La junta provisional de CAAE comunicó
a sus socios la transformación del organismo (ahora dependiente de la DGA) en
una corporación de derecho público y detalló su propuesta para participar en el
proyecto de recuperación de la huerta zaragozana.
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