Miembros
de la Asociación de Minusválidos Bílbilis (AMIBIL), que desde hace 18 años
trabaja con las familias de las personas con discapacidad intelectual, se
desplazaron a la ciudad celtibérica de Segeda (Mara) para participar en la
recogida de uva y pisado al modo celtibérico. Fue en el lagar reproducido a
través de la Arqueología Experimental en uno de los espacios que conforman el
Parque Arqueológico de Segeda.
Más
de 18 jóvenes disfrutaron de esta actividad caracterizados con indumentaria
celtibérica, de los modos de vida celtibéricos,
donde se les prestó atención personalizada. Del mismo modo degustaron el mosto
que ellos habían elaborado.
Segeda
con sus más de 45 hectáreas de extensión fue la más extensa de las conocidas en
el Norte de la Península Ibérica. Las excavaciones arqueológicas en el 2002
sacaron a la luz en el Poyo de Mara de Segeda I un lagar de yeso fechado, al menos, en el 153 a.C indicativo
de que los celtíberos consumían vino.
La aparición del lagar propició
el desarrollo de la iniciativa Segeda Vitivinícola que tiene como objetivo la
protección, conservación y musealización de dicha estructura y el desarrollo de
otras iniciativas en el campo de la investigación sobre la vid y el vino en
época celtibérica, a partir de la correspondiente experimentación de los
procesos vitivinícolas. Desde el año 2006, el Parque arqueológico de Segeda ha
ido desarrollando actividades didácticas recibiendo a grupos escolares de centros educativos de la Almunia, Mara y Miedes, así como
AMIBIL, colectivo muy sensibilizado con la producción y transformación
vitivinícola.
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