[Artículo publicado por
el director de GASTRO ARAGÓN en EL PERIÓDICO DE ARAGÓN, del viernes, 15 de junio]
Que por ejemplo equivaldrían al
valor del agua mineral embotellada en Aragón durante 53 años y medio, pues se
factura anualmente unos 56 millones. O las ventas de todo el sector
agroalimentario aragonés —2503 millones en 2009— durante unos catorce meses,
que se irían a cinco años, si solo contamos el valor de lo que exportamos, y,
eso sí, bajaría a apenas ocho semanas, si lo comparamos con la producción total
industrial aragonesa, que fue de 17 715,2 millones de euros hace un par de
años.
Es también lo que costaría de
todo el trigo cultivado en Aragón —con los datos de 2007— durante 21 años. Si
lo medimos en vino, supone las ventas de la DO Cariñena, la mayor en volumen
monetario, durante 55,5 años, con cifras de 2008, es decir 27,5 millones de
botellas en términos redondos; que al ritmo que se consume actualmente en Aragón,
nos supondría más de 18 meses bebiendo cada aragonés, bebés y abstemios
incluidos, los 16 litros anuales de media estimada en España.
Si usamos el cordero como unidad
de medida, equivalen al precio de los que criaríamos en 29 años, unos 55
millones de corderos, con lo que nos tocarían a más de 70 corderos por
aragonés.
Es
decir, da igual, aun traduciendo las cantidades monetarias a algo tangible, las
cifras siguen siendo tan alucinantes que uno resulta incapaz de hacerse a la
idea.
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